En verano el chileno cogió la maleta y partió del club madridista. No tuvo buena relación con Florentino en ningún momento, y los aficionados tampoco le querían. No se le dio continuidad y se pensarían que en un año se puede conseguir todo lo perdido en seis, qué ilusos.
Llegó a la capital don José Mourinho; “the Special One” para muchos y “ese portugués, que hijo p*** es” para otros. Absolutamente todo el madridismo estaba ilusionado con la llegada del de Setúbal. Consiguió hacer triplete con el Inter (liga, copa, champions) y, sobre todo, consiguió eliminar al Barcelona en las semis de Liga de Campeones. Eso es lo que motivó a Florentino para fichar al portugués.
El Madrid por esas fechas llevaba dos temporadas siendo humillado por el club catalán. El 2-0 y el 2-6 seguían retumbando por la mente de los seguidores merengues como si de una horrible pesadilla se tratara, y para colmo en la temporada anterior fallaron lo infallable en el Camp Nou (1-0) y cometieron despistes imperdonables en casa (0-2).
"No hace falta decir nada más", como diría Schuster.
El primer clásico de esa temporada se disputó en el Camp Nou. El Madrid salió con su XI habitual y los culés parecían embriagados por la motivación y el ambiente festivo que conllevaba este partido, sin embargo los madridistas se habían olvidado quitarse los pañales. Cuando el colegiado pitó el final del partido, toda Barcelona alzaba sus dos manos en señal del 5-0 que acababan de endosar los suyos a su rival directo. El “cinco lobitos tiene la loba” atronaba en el coliseo azulgrana. La maldición seguía con más fuerza, los madridistas ni siquiera salieron al campo, parecía que se habían quedado en el vestuario. Al menos así podrían haber tenido excusa. Bien es cierto que ellos no pusieron huevos en la sartén, pero la táctica nefasta fue obra del portugués. Doble pivote y defensa adelantada con un lateral totalmente ofensivo y el otro “de pega”, por llamarlo de alguna manera. Sergio Ramos no es lateral, por más que algunos se empeñen y por más que le colocaran ahí a causa del bajón de rendimiento de Míchel Salgado, hace ya unos añitos. Todos los goles o casi todos llegaron por la banda del de Camas. Pases al hueco con un Ramos totalmente vendido. Era evidente la humillación, y pudo ser mayor.
Barcelona 5-0 Real Madrid
Después de este partido se cuestionó a Mourinho pero nadie pidió su salida (al menos los aficionados fueron inteligentes).
Llegados al nuevo año, el Madrid por fin consiguió dejar atrás su letargo en octavos de final. El Madrid pasó la eliminatoria frente a los Lyoneses (1-1 en Gerland y 3-0 en el Bernabéu). Llegó hasta semifinales después de dejar por los suelos a un Tottenham con bastantes cracks en su escuadra. Además, siguió su camino por la Copa del Rey hasta plantarse en la final, cómo no contra los azulgranas.
Real Madrid 3-0 Olympique Lyonnais Real Madrid 4-0 Tottenham
Nadie se esperaba esta oleada de clásicos, cuatro en total (vuelta de liga, final Copa del Rey y eliminatoria de Champions). La Liga estaba parcialmente perdida, ya que por aquel entonces el Madrid estaba 8 puntos por debajo del Barcelona. Así pues, Mourinho decidió emplear este partido para buscar soluciones ante la inminente final de Copa en Mestalla. Era su primer clásico como local en el Bernabéu y, a pesar de que la afición madridista es soberana (quiere ver juego y dominio blanco), decidió introducir a Pepe en el trivote, acompañado de Xabi Alonso y Sami Khedira.
El Barcelona tuvo una posesión de balón escandalosa, aunque bien es cierto que el Madrid lo quiso así. Renunció a la bola y prefirió defender las oleadas azulgranas a base de presión constante, marcaje en zona y suerte, mucha suerte. Pepe mantuvo a raya a Messi. El Barcelona no llegaba con una claridad pasmosa al área del Madrid hasta el minuto 53, donde Albiol cometió un penalti estúpido sobre Villa. Messi lo transformó rompiendo la táctica de Mourinho. No se esperaba este inconveniente y decidió meter a Özil, Arbeloa y Adebayor por Benzema, Di María y Xabi, respectivamente. Pasó de defensa a ataque en un abrir y cerrar de ojos, y al final consiguió su recompensa: penalti sobre Marcelo en el minuto 82 de partido. El luso no falló, poniendo las tablas en el marcador.
Penalti de Albiol sobre Villa Gol de Ronaldo de penalti (1-1)
Sin querer o queriendo, Mou había descubierto un arma a priori infalible contra el Barcelona. Pepe: el antiMessi. A los seguidores blancos les supo a victoria este empate a pesar del poco trato y las pocas ocasiones que tuvieron. Después de tantas temporadas a la sombra de los culés, este resultado era una bocanada de aire fresco.
Gol de Cristiano Ronaldo (1-1) Pepe, "el antiMessi"
Tan sólo cuatro días después iba a llegar otro clásico, esta vez la final de Copa del Rey que se jugaría en Mestalla. Después del empate liguero el Madrid llegaría con más confianza a este encuentro. Tantos años de derrotas frente al máximo rival había dejado tocados tanto a los jugadores como a los seguidores blancos.
Mourinho volvió a apostar por el trivote, después del “buen resultado” frente a los azulgranas en el partido de liga.
La primera parte del Madrid fue sublime, el Barcelona apenas creó peligro a Casillas y el Real rozó el gol con los dedos. El palo fue el que separó la gloria de la desilusión, ya que el guardameta Pinto estaba vendido ante el gran cabezazo de Pepe. El Madrid “dominó” al Barcelona y no precisamente en posesión, sino en control del juego. Los catalanes apenas pasaban de la línea del mediocampo. La presión madridista fue excelente.
La segunda mitad dio un giro de 90 grados tras lo visto en la primera parte. Ahora era el Barça el que llegaba al área blanca, poniendo en aprietos a Iker tras varios disparos buenísimos tanto de Pedro como de Iniesta. Undiano Mallenco anula un gol a Pedrito en el minuto 68 de juego. El canario arrancó en fuera de juego y el linier acertó en la decisión. Tan sólo un minuto después Mourinho dio entrada al todopoderoso Adebayor, tras ver a Özil desgastado e inerte. En la prórroga dominó más el Barça en algunos aspectos, pero en el minuto 102 el reloj de Mestalla se paró por unos instantes. Marcelo toca con Di María. Di María se la devuelve al carioca y sale escopetado por la banda. El brasileño le devuelve el balón con una pared perfecta. Si Alves es moto GP, Di María fue la velocidad de la luz personificada. Ganó en carrera al “2” del Barça y sacó un buen centro con la pierna izquierda. Cristiano estaba expectante, viendo cómo el balón iba directo a su testa. El gol se vio 4 segundos antes de que entrara en la red. Cabezazo marcando los 3 tiempos y siendo un gol que valía un trofeo. Después de 18 años los merengues pudieron acudir a Cibeles a celebrar esa Copa que los más pequeños no habían podido ver en su corta vida.
Campeones Copa del Rey 2010/11 Gol de Ronaldo en el 102' (0-1)
El Madrid se lo creía, había conseguido ganar al Barcelona y los ánimos estaban por las nubes. Así llegarían a la ida de las semifinales de Champions.
Celebración por las calles de Madrid Pepe le dedica el gol a los culés
Esta vez el portugués decidió poner a Pepe como guardaespaldas de Messi. Su discurso sería algo así como “si Messi se va a la banda, usted va con él. Si Messi va a orinar, usted le acompaña. Y si Messi intenta desbordarle, usted hace lo que pueda para que el argentino no pase de ahí”.
Lamentablemente esta vez salió mal la jugada, y después de la expulsión de Pepe por la más que rigurosa roja ante la entrada a Alves, el Barça se desmelenó y el mejor jugador del mundo –esta vez sin vigilancia–, anotaría los dos tantos que pondrían al Barça como virtualmente finalista.
Roja directa a Pepe Celebración gol de Messi (0-2)
El Bernabéu criticó este esquema “antifútbol” para muchos, táctico y defensivo para mí. A veces la suerte no acompaña y menos en casa, donde en teoría hay que ir a matar. Ya habrá tiempo de encerrarse en el feudo rival.
En la vuelta el Madrid salió a morder pero cuando los merengues más se lo estaban creyendo, el árbitro la lía pitando una falta de Cristiano, cuando en realidad había sido al revés. Higuaín finalizó la jugada introduciendo el balón en la red pero ya estaba invalidada.
Pedrito puso el gol de la tranquilidad para los azulgranas y Marcelo dio esperanzas inexistentes a unos aficionados que volvían a las andadas de perecer en los clásicos.
Debo añadir (por historia más que nada) que las últimas semifinales de Champions que disputaron Madrid y Barça acabaron con este mismo resultado. 0-2 para el Madrid en el Camp Nou y 1-1 en el Bernabéu. Es cuanto menos, curioso. Ambos terminarían campeones en sus respetivas ediciones.
Gol de Pedro (1-0) Gol de Marcelo (1-1)
El Madrid acabó la temporada siendo subcampeón de liga, campeón de copa y semifinalista en Champions. No está tan mal teniendo enfrente al mejor equipo del mundo y contando que era la primera temporada de Mourinho a cargo del Madrid.
Llegó agosto, y tocaba disputar otra final a doble partido.
En la Supercopa de España el Madrid decidió salir con su XI habitual. Comenzó ganando gracias a Özil pero el Barça antes del descanso volvió a poner las cosas como venían estando, con goles de Villa y Messi. Al final Xabi Alonso consiguió empatar el partido, el cual dejó con mal sabor de boca a los madridistas ya que necesitaban un 0-2 en el Camp Nou para llevarse el trofeo.
Gol de Özil (1-0) Gol de Messi (1-2)
La vuelta sería todo un jarro de agua fría para una afición que creía en la remontada. En el minuto 14 marcó Iniesta, y a pesar de ello Cristiano anotó el empate 5 minutos después. Messi marcó antes del descanso y Benzema en el 82 ponía momentáneamente al Madrid en la prórroga. Messi apareció de nuevo ante la desesperación de los merengues. Parecía que les habían arrancado el corazón con la mano. No había forma de poder sacar algo positivo en estos partidos.
Gol de Benzema (2-2) Barcelona campeón Supercopa España (3-2)
El Madrid arrancaba a 8 puntos del Barcelona en la presente campaña. El Clásico iba a disputarse en el feudo blanco, y los madridistas estaban expectantes. Veían al oso herido, perdiendo vida contra animales a priori frágiles y vulnerables. Lo que no sabían es que los osos luchan hasta el final, y los merengues recibieron un 1-3 bastante doloroso. “No vendas la piel del oso antes de cazarlo” dice el refrán. Da igual que esté herido. El resultado pudo ser un 1-6 perfectamente. El Madrid se adelantó gracias/por culpa de un error de Valdés a los 25 segundos de partido, el cual Benzema aprovechó a la perfección. Creo que fue de las pocas ocasiones que tuvo el Real en este partido, si no la única.
“La vida sigue igual” que dice la canción de Julio Iglesias. Así se sentían los madridistas después de oootra derrota en casa. Creo que a muchos ni les afectó, y es lo que conlleva la costumbre. Al final te acabas acostumbrando al dolor, al sufrimiento.
Gol de Benzema a los 25'' (1-0) Gol de Fàbregas (1-3)
Año nuevo, vida nueva dicen muchos. Malditos refranes. Son capaces de decir verdades como puños o ser más mentirosos que la existencia de un ser superior.
Nos esperaba otra tanda de clásicos en copa del rey, esta vez en cuartos de final. El Madrid eliminó al Málaga con mucho sufrimiento y por su parte el Barcelona dejó a Osasuna tocado y hundido.
Gol de Benzema (0-1) Osasuna 1-2 Barcelona
La ida en el Bernabéu iba a ser un calco del partido de liga de esta campaña. La única diferencia fue el esquema, en el que Mourinho decidió volver a incluir a Pepe en el trivote. El Madrid se adelanta por medio de Cristiano Ronaldo y de repente, se duermen. En vez de ir al ataque, se siguen volcando atrás. El gol de Puyol se vio venir desde antes del descanso. Jugada ensayada y el de Lérida, totalmente solo, mete el balón en las redes. Jugada clásica del Barça cuando lo ve algo negro. Después llegaría el gol de Abidal, y el Madrid decidió “descansar” después de este golpe. Pudieron caer muchos más, de ahí el calco al partido vivido anteriormente.
Gol Cristiano (1-0) Gol Abidal (1-2)
Después de este resumen de clásicos la gente decide ir contra Mourinho, algo normal por otra parte. Ha tenido oportunidades de sobra para intentar ganar al Barça y lo más que ha conseguido ha sido 1 victoria, 3 empates y 5 derrotas ante los azulgranas. Un promedio más bien bajo pero analicemos una cosa:
La gente debería saber que el Barça es el mejor equipo del mundo. Les puede doler, pero es así y está comprobado. Sólo hay que mirar el palmarés de un equipo y otro en estas últimas temporadas para darse cuenta. Sólo hay que ver que tienen al mejor futbolista del planeta.
De acuerdo con esto, no es precisamente fácil ganarles. Yo diría que es más bien improbable, que no imposible.
Lo que no se puede hacer es adelantarte en el marcador y agazaparte atrás. Y lo que tampoco se puede hacer es salir sin cojones a un clásico, porque es inviable. ¿Necesitan motivación en un partido como este? Permitidme que me ría.
¿Solución? USAR LAS BANDAS Y NO EMBOTELLARSE. Ser constantes tanto en la presión como en la defensa. Y sobre todo NO RENDIRSE NUNCA.
Ahora hablando del post diré una cosa: este Madrid no puede echar a José Mourinho, ni José Mourinho puede irse de este Madrid, ya que sería un error. Llevamos AÑOS echando a entrenadores por perder contra el Barcelona o no ganar nada, pero resulta que el Barcelona juega en nuestra liga, lo cual disminuye las posibilidades de éxito. Aún así les hemos quitado una Copa en un enfrentamiento directo y hemos llegado a semis de Champions, algo que desde la 2002/2003 no olíamos. ¿No está mal, no?
Y hablando de esta campaña, vamos primeros en liga sacándole 5 puntos al Barcelona. 5 PUNTOS SEÑORES, 5 PUNTOS AL MEJOR EQUIPO DEL MUNDO. ¿Qué más quieren? Contra ellos se achantan, de acuerdo. Pero tampoco es fácil plantarles cara, hacen un juego bastante difícil de contrarrestar. Estamos en octavos de final de liga de campeones y, de momento, en cuartos de final de Copa.
El madridismo necesita UNIRSE Y NO DIVIDIRSE POR CHORRADAS. Estoy harta de ver a los piperos pitar a los nuestros. La afición del Madrid es soberana pero hay que tener un poco de cabeza… Necesitamos un proyecto sólido, y de momento con Mourinho vamos por buen camino. Será provocador, chulo, prepotente, pero es un entrenador como la copa de un pino.
¿Queréis echarle y traer a Míchel que es de la casa, aunque sea un pésimo entrenador? Muy bien, volvamos a tropezar con la misma piedra. Luchemos por entrar en Europa League, que al fin y al cabo es lo que nos merecemos, por ser tan tontos y no apreciar lo que tenemos.
¿Sabéis lo que os digo? Que si yo pedí continuidad para Pelle, la pediré también para Mourinho. Porque un proyecto no se construye en 2 años. No chascas los dedos y descubres un esquema y un tipo de juego infalible.
Los demás que piensen lo que quieran y sigan echando a entrenadores. Al final acabaremos en la mugre y fichando estrellitas cada temporada sin conseguir éxito alguno. Sigamos así, pidiendo cantera cuando más de uno ni siquiera se digna a ver los partidos del Castilla. Sigamos pidiendo españoles aunque nos pidan 50 millones por cada uno. Sigamos comprando el MARCA y el As a pesar de que no paren de lavarnos el cerebro e intentar dividirnos. Sigamos así, señores, que nos va a ir muy bien.
Mourinho cometerá errores como todo ser humano, pero es de lo mejor que podemos tener ahora mismo, y de lo mejor que podemos aspirar.
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