Manolo, un gran hombre

Según se rumorea por Twitter, Manolo Preciado ya no es entrenador del Sporting de Gijón, Manolo deja al club de sus amores, con 18 puntos a tres de salir del descenso. Personalmente, creo que es un error destituir a Preciado, hombre honesto y humilde que con trabajo ha conseguido salvar muchas veces de la quema al Sporting. 

De su mano llegó el éxito de subir a primera, de su mano se ha conseguido mantener en primera a un gran club y de su mano se ha conseguido derrotar y dejar sin ligas a grandes del fútbol español. 

Pocos son los sportinguistas que dirán algo malo de su ex-mister y muchos serán los que le agradecerán los años dados al Sporting.

Preciado no se ha dejado ningunear por nadie y siempre ha dejado al Sporting con un buen cartel al final de temporada, se ha ganado un prestigio que muchos entrenadores, por muchas copas que tengan, no conseguirán en mucho tiempo.

Todos los años, él ha conseguido formar un buen equipo de jugadores flojos y con poco cartel, todo con trabajo y dedicación.

Preciado remontó el vuelo del Sporting y lo ha llevado a lo alto de la primera.

Ahora con su destitución el fútbol y el tiempo hablará, pero yo optimista no soy. No me considero seguidor sportinguista, pero si siento una fuerte admiración al club asturiano.

Preciado es un hombre que me cae bien y a muchos cae bien, no se merece acabar su carrera en el Sporting (quizás vuelva algún día) a mitad de temporada y sin poder ayudar para salvar, una vez más, a su Sporting.

Algo de culpa tendrá el bueno de Manolo pero la principal culpa es de la planificación, en junio llegaron fichajes y todavía muchos están esperando a que lleguen. Con esto digo todo acerca del rendimiento de las altas. Ni uno destaca. Y lo más doloroso es que el Sporting en seis meses va a ver como sus dos pilares desaparecen. Primero fue Diego Castro y ahora Manolo Preciado.

Solo espero que el Sporting no se arrepienta de esta última pérdida y consiga mantener la categoría.

Esperemos volver a verle pronto, canalla (como muy bien él diría).

Suerte.